Pese a ser la etapa más larga en longitud tuvimos mejores ritmos al discurrir en un 90% por el desierto, donde las grandes hammadas fueron las protagonistas de la jornada. Esta etapa nos llevó desde el Hotel Xaluca en Dades hasta las puertas del desierto del Sahara, en Erfoud. A lo largo del día, nos sumergimos por paisajes tan diversos como impresionantes disfrutando del inicial paisaje de montaña para ir bajando al sur y dar paso a un paisaje más árido.
Partimos rumbo a las montañas de Izoumange y Taourirte, donde los valles rocosos y las tierras áridas dominaban el horizonte. Seguimos hacia Amjdadar y Akhamsi, donde la belleza agreste daba paso a las vastas llanuras desérticas que nos acompañaron gran parte del día. En Nkob, los exuberantes palmerales nos ofrecieron un respiro visual antes de adentrarnos de nuevo en la aridez creciente al pasar por Amom y Tanoumrite. Al seguir hacia el sur, llegamos a Tifrit, donde el desierto comenzaba a dominar completamente el paisaje. Un punto de interés cultural es la histórica mezquita de Houda, que encontramos antes de llegar a Risani, ciudad que fue un importante centro comercial en la antigua ruta de caravanas y que actualmente cuenta con un mercado que bien merece una visita y disfrutar de la variedad de especias que allí encontramos. Finalmente, la etapa culminó en el Hotel Xaluca en Erfoud, justo a las puertas del Sahara, rodeados de dunas y arenas doradas.
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